Revista

16 octubre, 2017

Las propuestas únicas no se autoproclaman, hay detalles, ideas y conceptos que lo evidencian. Yliana Yépez lo sabe, motivo por el que su trabajo habla por ella.

Con una carrera de 20 años en el en el mundo de la moda, sus ideas se ven plasmadas en bolsos y carteras dignos de ganarse un adjetivo acuñado a la autenticidad.

La calidad es un aliado clave al momento de escoger los insumos: herrajes metálicos, cuero, bordados, entre otros. Sus creaciones resaltan por el uso de materiales duraderos, conjugados con diseños sin fecha de caducidad, por lo que sus bolsos son óptimos para durar por mucho tiempo en el clóset. Son trascendentales.

Yliana empezó en el mundo del diseño desde muy joven, cofundando la marca Blues by KyKy, y en toda su trayectoria ha sabido evolucionar con las tendencias, manteniendo su sello característico, otorgado por influencias culturales y artísticas: “El ojo tiene que viajar y, mientras más experiencias y visión se tenga, es posible abarcar mucho más en el diseño y en conocer hacia dónde va el mundo. Cada vez que visito algún sitio, siempre tomo fotos de lo que más me gusta, lo más atractivo. Luego decido las imágenes que mayor inspiración me causan”.

Nueva York le abrió las puertas, transformándose en una influencia directa para su perspectiva creativa, la cual le permitió trazar un camino propio entre la multitud de diseñadores emergentes: “Siempre tengo una idea que me viene a la mente de lo que quisiera hacer, algunas veces es gracias a una tendencia o un material, otras veces está inspirado en otro artista. Siempre estoy a la búsqueda de objetos, colores y texturas en mi rutina diaria”.

Mantenerse en esa búsqueda constante es su secreto para el éxito, además de su vocación y entrega para cada pieza concebida. “Dejo todo sobre mí en los diseños que realizo, me involucro en un 100 %, desde la escogencia de los materiales, hasta el envío hacia sus destinos finales”. Sin duda, esa pasión le ha permitido llegar lejos en la industria, siendo reconocida por celebridades e íconos de la moda como Cara Delevingne, Lady Gaga y Demi Moore.

Sus colecciones cuentan una historia, mantienen una conexión especial. “Para mí es muy importante que la colección tenga sentido dentro de un contexto. Las carteras que hago tienen su propia personalidad y pertenecen a un concepto. No fabrico bolsos y ya, son parte de una historia en especial”. Con cada temporada, sus ideas se ven reflejadas en bolsos únicos de cada colección, son ediciones limitadas. Todo para darle más credibilidad a su haber artístico.

Más allá de la fama, Yliana persigue mantener la individualidad y libertad creadora, llevando sus ideas como estandarte. Considera que el tiempo es su mejor aliado en este camino que decidió transitar, porque “la constancia y el trabajo es lo más importante en esta industria”.

Colección “Pool Party”

Bajo un concepto inspirado en la integración de las fiestas de las piscinas de los años 50 –tomando como inspiración la emblemática foto de Slim Aarons– con la época actual, la colección toma como musa los toldos de rayas blancas y negras de hoteles, como el Beverly Hills. Además, en el siglo 21, los inflables con formas de cisnes, patos y pelotas de colores son característicos, incluyendo el Art pop y el cartoonish como trabajos visuales que hablan de la modernidad en su propuesta, siendo un aporte perfecto para la colección primavera-verano 2017.