DONDYK+RIGA

“¿El mejor manager que tendrían Las Águilas? Pues yo, ¡Jorge Miquilena!”. Cuenta que fue la cabeza del equipo por 10 minutos: una oportunidad que le brindó Eduardo Pérez. “Iban a cambiar el pitcher y me dieron ese honor. Me dijeron: ‘andá a cambiarlo’ y nunca voy a olvidar eso. Salí y hasta los cerveceros me aplaudieron”. Este es Jorge Miquilena, el bat boy de cuatro décadas. Este es su trabajo desde 1960 y con Las Águilas del Zulia está desde 1969. Tiene 75 años y nació el 24 de enero de 1937. “En mi uniforme tengo el 00, yo también escogí mi número como los peloteros”. El hombre de pequeña estatura no titubea para asegurar que le hubiese gustado ser grandeliga y jugar la posición del cátcher. “Es que el béisbol es mi vida, mi ilusión, mi todo”. Tiene el acento tan zuliano como el equipo del que forma parte y del que habla en primera persona. De los grandeligas que conoció de “pichones” nombra a Wilson Álvarez, el primer pitcher venezolano y zuliano que logró un no hit no run en las mayores. Luego a Greg Maddux, candidato al hall de la fama y al shortstop, Jimmy Rollins. Empezó como recoge bates en el equipo Pastora y de allí saltó al club house del llamado equipo rapaz. Fue manager amateur de Limenor y en esa categoría logró alzarse con el campeonato nacional en 1966. El juego de Las Águilas que le gustaría repetir es el de la final de la temporada en 1983 contra Lara. “Ese día nos titulamos campeones por primera vez. Yo estaba al lado de Pepo, Luis Ruperto y le dije: ‘Cómo estará tu papá Luis Rodolfo allá en el cielo’ y los dos nos pusimos a llorar”. Tiene tres hijos y es viudo. Uno de ellos, Manglanier Penzo es el trainer de Carlos González, el jardinero zuliano en las mayores. Asegura que no le hubiese gustado dedicarse a otro oficio. “Nunca tuve oportunidad de ver otra cosa que no fuera el béisbol. Me crié con mi mamá solo y a la fecha no me quejo. Estoy agradecido. Hubo un tiempo en la que me preguntaban quién es tu papá y yo decía que era Alejandro Borges”. De los peloteros que admira están Carlos González y Luis Aparicio. “Yo estaba desde que él jugaba”. Tiene un dream team en su mente en el que incluye a los mejores jugadores que ha visto pasar en su historia con Las Águilas. Miquilena, al que ahora todos llaman “Miqui” tiene un sustituto al que ha formado, su nieto Augusto Medina. “Lo traje desde los ocho años y ya tiene 24”. Este hombre también tiene récords dentro del equipo: Es el único bat boy que han expulsado de un juego por reclamarle a un umpire y es la única persona que ha estado presente en todos los juegos de Las Águilas desde su fundación. S.U.

También te puede interesar

Grupo Vía, los invitados de siempre

Lurdiana, María Elena y Luis Guillermo Bohórquez, liderazgo avícola en el seno familiar