7 agosto, 2023
GRUPO TENDENCIA
Busca por palabras claves, luego dale a enter
‘The French Dispatch’ llenó el Festival de Cine de Cannes con una buena dosis de color, simetría y las musas favoritas de Wes Anderson. Se trata de la décima película del genio director, que reúne a algunos de sus más grandes colaboradores para dar vida a su carta de amor a Francia y al periodismo.
Anderson y el gran elenco llegaron a la alfombra roja de Cannes en un autobús, con un sonriente Bill Murray en el asiento del copiloto. La película cuenta con el elenco más deslumbrante que se presenta en el festival este año. Junto a Murray, estuvieron para el estreno Tilda Swinton, Benicio Del Toro, Owen Wilson y Timothée Chalamet¸ quien a sus 25 años asistió a su primera alfombra roja en Cannes. ‘The French Dispatch’ fue seleccionada para Cannes el año pasado, pero el festival se canceló debido a la pandemia, por lo tanto, la cinta de Searchlight Pictures optó por esperar para su estreno y finalmente llegará a los cines en octubre.
La película está inspirada en una famosa revista real de Nueva York y sigue la historia de sus últimos días, contada desde la perspectiva de Bill Murray, quien interpreta al editor Arthur Howitzer Jr., un personaje inspirado en el editor fundador de The New Yorker, Harold Ross, quien debe liderar a un equipo de periodistas que viven y trabajan en una ciudad francesa del siglo 20. El adelanto de ‘The French Dispatch’ muestra una serie de historias que se conectan a través de los personajes de la revista, mostrando escenas en los icónicos colores pasteles de Wes Anderson, además de escenas en blanco y negro que muestran los momentos más oscuros por los que pasan los personajes.
En ‘The French Dispatch’, Bill Murray es el editor, Owen Wilson interpreta al escritor Herbsaint Sazerac, mientras que otros miembros del personal editorial son interpretados por Tilda Swinton, Elisabeth Moss, Fisher Stevens, Griffin Dunne y Wally Wolodarsky; además de Benicio Del Toro como el artista encarcelado Moses Rosenthaler, y Timothée Chalamet como un estudiante revolucionario, llamado Zeffirelli. La película es una carta de amor al periodismo y es la primera del director que se ubica en Francia, incluso se dice que Anderson tomó el pueblo en el que se filmó y lo transformó en un gran escenario.
