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El pasado domingo se emitió, mediante el canal estadounidense CBS, la reveladora entrevista de Oprah Winfrey con el príncipe Harry y Meghan Markle, convirtiéndose en un momento muy esperado para descubrir los secretos de sus vidas privadas en el Palacio de Buckingham.
En la íntima conversación, la pareja habla de las presiones en el palacio, así como del racismo, la salud mental y la dinámica de la familia real, siendo sus más fuertes declaraciones:
«Simplemente ya no quería vivir», confiesa Meghan Markle en uno de los momentos más dramáticos de la entrevista, tras la pregunta de la periodista a la duquesa de Sussex sobre algunas de sus declaraciones pasadas, en las que describía su etapa como miembro de la realeza en Reino Unido como algo casi imposible de «sobrevivir». «Simplemente ya no quería seguir viviendo», respondió Markle, explicando que se sintió «avergonzada» de confesárselo al príncipe Harry, su esposo e hijo de Lady Di, por las grandes «pérdidas que ha sufrido». «Fue un pensamiento constante, real y aterrador», señaló.
En medio de la fuerte presión mediática, que la pareja criticó duramente, la duquesa de Sussex explicó que limitaron sus actividades y no pudo salir de casa en meses, lo que le llevó a sentir una profunda soledad. El príncipe Harry, por su parte, explicó que no tenía «ni idea de qué hacer» y que él mismo acabó «en un lugar muy oscuro». «No tenía nadie a quien recurrir», manifestó. Fue después de este episodio tras el que decidieron apartarse de sus roles, en marzo de 2020, y marcharse del país, tras denunciar la discriminación, mentiras y persecución de los tabloides británicos. «(Harry) nos salvó a todos la vida», manifestó Markle.
Por su parte, el príncipe Harry comentó que su padre, el príncipe de Gales y heredero al trono, dejó de atenderle el teléfono en medio de la crisis. «Hay mucho que trabajar (en esa relación)», señaló. «Me siento realmente decepcionado, porque él (su padre) ha pasado por algo similar, sabe lo que es el dolor… y Archie es su nieto». Además, Harry expresó su amor por su hermano, el príncipe William, pero su relación experimenta algo de «espacio» en este momento.
Con respecto a la raza del hijo de la pareja, Archie, no recibiría un título o seguridad, reveló Meghan, y dentro de la familia real, hubo varias «preocupaciones y conversaciones sobre cuán oscura podría ser la piel de (Archie) cuando naciera». Harry confirmó estas conversaciones, pero agregó que nunca compartiría detalles sobre estas.
Asimismo, la pareja confesó que se casaron tres días antes de la glamorosa boda real, dijo Meghan, y los votos de esa boda privada están enmarcados en su casa. Por su parte, ambos revelaron varios datos sobre cómo empezó y cómo seguirá. Entre ellos, anunciaron que el bebé que esperan será niña y, pese a las duras acusaciones, la reconocida presentadora terminó la entrevista en tono positivo tras preguntarle a la duquesa de Sussex si consiguió su final feliz con el príncipe, a la cual no dudó en responder: «Mejor que cualquier cuento de hadas que hayas leído jamás».