7 agosto, 2023
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Sin previo aviso el coronavirus se ha acaparando la atención del mundo, obligándonos a cambiar nuestro estilo de vida radicalmente de la noche a la mañana. Ante la fuerte expansión de la pandemia, muchos gobiernos del mundo han decretado la cuarentena colectiva, iniciando campañas sociales como #QuédateEnCasa que alientan a las personas a acatar la norma, y permanecer en sus hogares.
Hábitos y rutinas se han visto obligadas a dar un giro de 180º. El aislamiento está afectando nuestra manera de pensar, trabajar y comer, expertos aseguran que ahora más que nunca debemos fortalecer nuestro sistema inmunológico y esto puede realizarse con una dieta nutritiva en casa.
La ansiedad y el hecho no realizar tantas actividades físicas puede provocarnos comer más de lo debido y a escoger alimentos no sanos. Las claves para llevar una buena alimentación empieza por comer con conciencia, ya que el estrés muchas veces nos hace comer sin darnos cuenta mientras realizamos otras tareas, lo que hace que el cerebro no entienda que está alimentándose y posteriormente reaparezca la sensación de hambre.
Una acertada elección de alientos es un paso más para alcanzar una dieta nutritiva. Empieza priorizando frutas, hortalizas y verduras. Se debe escoger aquellas que se conserven en buen estado incluso fuera de la nevera, como: calabazas, zanahorias, mandarinas, peras, manzanas y naranjas.
Las legumbres no pueden faltar porque son altas en proteínas de origen vegetal, tienen larga fecha de caducidad, perfecto para esta situación en la que debemos evitar salir de casa la mayor cantidad de veces posibles. Por su parte, tener huevos también será muy beneficioso ya que al consumirlos las personas obtienen otra fuente de proteína.
Un punto fundamental es no improvisar ninguna comida, si en cambio planificas con antelación lo que comerás te asegurarás de crear platos balanceados y nutritivos. Otro dato que no podemos pasar por alto, es la higiene a la hora de cocinar, se deben lavar las manos antes y después de preparar los alimentos. En caso de estar enfermo o sospechar de tener el virus, se debe evitar a toda costa cocinar y manipular alimentos.
